21 mayo, 2006

Adiós

Bueno, queridos visitantes de El desierto azul, tocamos a nuestro fin. Oooooooh.

Han sido cuatro meses bastante agradables, compartiendo con vosotros mis cabreos, mis aficiones, mis momentos de buen humor (aunque hayan sido escasos)... Pero el desierto cierra. ¿Y eso? Pues ya ves tú qué cosas. Resulta que cada vez que publico una nueva entrada, alguien se acaba mosqueando, porque piensa que la dirijo encubiertamente contra su persona. Cuando no es Fulanito, es Menganito. Da lo mismo que asegure de todas las maneras humanamente posibles que el post en cuestión no va dirijido a nadie concreto. Mi palabra está bastante devaluada en los últimos tiempos.

Como ya dije hace unos posts, el blog es para mí una vía de escape. Una forma de soltar parte de los malos humos que llevo dentro. Además, os he dejado pistas de mis gustos musicales, y hasta de mi forma de ser. Obviamente, si es mi válvula de escape, no puedo estar pensando en la forma en que tengo que escribir para que nadie acabe mosqueado. Yo me pongo delante del teclado y dejo que salgan las palabras. Cuando he hecho un post un poco más bastardo sí que he buscado la forma de expresarme para azuzar a alguien. Pero generalmente no ha sido así.

Por esas cosillas tontas cierro el blog. No sé si seguiré escribiendo en otra parte. Dentro de nada vienen los exámenes y no voy a tener mucho tiempo, así que lo pensaré tranquilamente. De todas formas, al decir que cierro el blog me refiero a que no seguiré publicando. Por el momento no voy a darlo de baja.

Así pues, lo dicho. Un placer haber estado con vosotros, gracias por haberme leído y gracias por haber dejado comentarios (incluso al anónimo de hace un par de entradas).

Hasta pronto.

1 Comments:

Blogger arrrggh said...

Los blogs de alguna manera u otra son necesarios, sobre todo para nosotros.

Hasta pronto.

22 may 2006, 14:54:00  

Publicar un comentario

<< Home